Si queremos tener una visión panorámica de la Literatura venezolana, debemos considerarla desde sus inicios, es decir, desde la etapa denominada Prehispánica, etapa previa a la llegada de los españoles y en la que nuestro territorio estaba poblado por diversidad de grupos humanos que, según señala el historiador y crítico Pedro Díaz Seijas (1966:7), poseían manifestaciones culturales primitivas (entiéndase, que no estaba tan desarrolladas como las de los futuros conquistadores). Esto tiene su razón de ser en el hecho de que nuestros antecesores deambulaban por el territorio nacional (eran nómadas) y, debido a ello, no habían alcanzado el mismo desarrollo político y social de sus vecinos centroamericanos. A estos grupos dispersos en el territorio nacional Herríquez Ureña (ciatdo en Díaz Seijas, 1966:7) los denominó “pueblos de culturas medianas” y “tribus de culturas sencillas”.
No obstante, “aquel mundo primitivo contó con la defensa de los más aguerridos caciques” (Ídem, 1966:8) entre los que resaltan los nombres de Guacaipuro, Paramaconí, Sorocaima, Tamanaco, Tiuna, entre otros. Ahora bien, ante el atropellamiento del conquistador sus manifestaciones culturales se vieron asfixiadas. Así, se quedaron de lado “sus mitos, sus leyendas, su explicación primitiva de los grandes acontecimientos de la Naturaleza” (ib.), ya que la destrucción fue total: física, social, psicológica y cultural. Fue precisamente mediante esta acción desintegradora que los españoles establecieron las primeras ciudades.
No obstante, “aquel mundo primitivo contó con la defensa de los más aguerridos caciques” (Ídem, 1966:8) entre los que resaltan los nombres de Guacaipuro, Paramaconí, Sorocaima, Tamanaco, Tiuna, entre otros. Ahora bien, ante el atropellamiento del conquistador sus manifestaciones culturales se vieron asfixiadas. Así, se quedaron de lado “sus mitos, sus leyendas, su explicación primitiva de los grandes acontecimientos de la Naturaleza” (ib.), ya que la destrucción fue total: física, social, psicológica y cultural. Fue precisamente mediante esta acción desintegradora que los españoles establecieron las primeras ciudades.
This entry was posted
on martes, 23 de septiembre de 2008
at 7:31:00 a. m.
and is filed under
caciques,
literatura nacional,
literatura venezolana,
prehispánica
. You can follow any responses to this entry through the
comments feed
.